Jonathan Zak is producer of Timbre 4 (Argentina). Led by director Claudio Tolcachir, Timbre 4 is a prestigious Argentine theatre company that has been working for over 20 years. They work creating and producing plays. Some of their most famous works are La omisión de la familia Coleman, Tercer cuerpo, El viento en un violín, Emilia, Próximo y Dínamo, which have been presented in festivals in Latin America, the USA and Europe. In addition, Timbre 4 has its own school, in which they offer a wide variety of workshops and courses for different levels and ages. Website Please describe your artistic practice and how it has been affected by the COVID-19 pandemic. Our artistic practices focus on Performing Arts, specifically, theatre. We have three axes: we schedule and broadcast other artists’ work, we create and produce our company’s plays, and we have our school. In addition, every year we organize the “Temporada Alta” Festival. Due to COVID-19, all our activities have been affected, since we had to close our theatre and our school. We had to change the way that we work and move to the online world evaluating the things we can do under the new circumstances, balancing the things we were interested in and the things we can't do. We have been able to work remotely in a way in which our tasks and activities get close--or, at least, try to do so-- to the kind of work we did before the pandemic. What are some of the experiments that you have worked on to cope with the restrictions to live performance caused by the pandemic? In the case of the school, all of our classes have been reformulated and adapted to the online delivery mode, and we have kept working according to the new restrictions. There was a big number of students who decided not to continue their learning process in an online modality, but there were others who decided to join, and we started offering courses and workshops that were specifically designed for the online delivery mode. While the pedagogical component moved to the online space, that did not happen with the shows that we had scheduled for this year, which have been canceled until further notice. The first couple of weekends after the quarantine was decreed, we acted fast and started streaming on YouTube recordings of plays that our company had staged in the past. By this action, not only did we keep working, but also we aimed to assist our audience in such a difficult time. The first weekend was amazing. We had over 100,000 views. In the second one, we enabled people to make donations and their contributions were higher than we expected. In fact, some plays got more income than they did when they were staged in our theatres. Besides the recordings from past shows, we have been streaming live performances via Zoom. We have also created, recorded and broadcast materials from home during the quarantine. Recently, we have live streamed plays from a TV studio, with a switcher and camera team. We have found other ways to keep creating content every week by inviting journalists to interview some of the artists who are presenting their work throughout the week. These different activities aim to promote dialogue within our community, as well as to generate some income during this period. What project(s) do you plan to do if quarantine continues? If the quarantine continues, we will keep teaching online and trying to connect with our audiences by giving them materials from our archive, generating new materials, and creating spaces to link with institutions that can support us. We have strengthened our skills to deal with crises. We feel supported by the fact that, on the one hand, we have the whole supply chain: we write, we stage, we act, we direct, etc. On the other hand, we have a variety of materials for different situations. In this sense, neither virtuality nor the return to the face-to-face format is going to catch us off guard. Has the pandemic made you renew/rethink/transform your practice? Pandemic made us rethink, renovate and transform everything, since the work we used to do could no longer be done. Knowing that something like this can happen has led us to make some decisions about our future work. For example, we have come to realize the importance of having high quality recordings of our performances, so that we can stream them. At the moment, we need these online tools as a palliative measure. Once this situation is over, we can use them to enhance our work. For us, rather than replacing it, online tools will complement and amplify the work that we used to do. For example, there was an audience that, even though it was interested in our work, could not attend our shows, since they live far from our theatres. Now, live performances and recordings of past performances can be available for them. At the same time, spectators can engage with artists’ work in a different, complementary way, through the interviews. Thus, online tools and resources can enrich our work. -- interviewed and translated by Nae Hanashiro Jonathan Zak, Timbre 4 (Argentina) Timbre 4 es una prestigiosa compañía de teatro argentina dirigida por Claudio Tolcachir que hace 20 años viene desarrollando proyectos. Por un lado, se dedica a la creación, producción y programación de obras teatrales. Entre los proyectos más conocidos de su compañía, destacan La omisión de la familia Coleman, Tercer cuerpo, El viento en un violín, Emilia, Próximo y Dínamo, los que han sido presentados en una diversidad de festivales en América Latina, Europa y Estados Unidos. Por otro lado, Timbre 4 es un espacio de formación, que ofrece una amplia gama de cursos y talleres para públicos de distintas edades y niveles de experiencia. Website Por favor, describe tu práctica artística y cómo se vio afectada a partir del COVID-19.
Las prácticas artísticas que nosotros desarrollamos tienen que ver con Artes Escénicas, propiamente dicho, con el teatro. Tenemos un espacio de programación, un espacio de producción de obras de la compañía y una escuela. Además, todos los años organizamos un festival “Temporada Alta”. Todas nuestras actividades se vieron afectadas, porque debimos cerrar las salas de teatro, la escuela y la productora, y reconvertir nuestra modalidad de trabajo y trasladarnos al mundo virtual evaluando qué cosas se podían hacer, qué cosas no se pueden hacer, así como qué nos interesa hacer y qué no. Con la pandemia, todas nuestras actividades se vieron rotundamente afectadas. Hemos podido trasladar nuestras tareas al formato virtual para que se acerquen o intenten acercarse al trabajo que solíamos hacer. ¿Cuáles son algunos de los proyectos en los que la compañía ha trabajado durante la pandemia para hacer frente a las restricciones que tienen las obras en vivo? En el caso de la escuela, todas las clases se reformularon y se adaptaron para llevarse a cabo a distancia, así que seguimos trabajando con las restricciones del caso. Hubo una cantidad de alumnos importante que decidió no seguir con el proceso de manera remota, pero hubo otros que sí decidieron sumarse y empezamos a ofrecer talleres específicamente diseñados para el formato online. Lo pedagógico se trasladó al mundo virtual, pero no ocurrió lo mismo con los espectáculos que se iban a presentar este año de manera presencial, y que han quedado suspendidos por el momento. En los primeros fines de semana tras ser decretada la cuarentena, nos movimos rápido y pusimos a disposición del público en YouTube las grabaciones de obras de la compañía. Esta fue una forma de seguir trabajando y, al mismo tiempo, de asistir al público en un momento difícil. El primer fin de semana fue increíble. Tuvimos 100.000 visualizaciones. En el segundo fin de semana, en que abrimos la “gorra virtual”, tuvimos un nivel de aporte altísimo. De hecho, usando esta modalidad, algunas obras han generado más ingresos de lo que lo hicieron de manera presencial. Además de presentar material audiovisual de producciones pasadas, hemos comenzado a trabajar con streaming en distintos formatos. Nuestra programación ha incluido obras en vivo a través de plataformas virtuales. Hemos creado materiales desde casa en medio de la cuarentena para mostrarlos en formato audiovisual. De manera más reciente, hemos hecho teatro en streaming live desde el estudio de televisión trabajando en el mismo espacio con equipo de switcher y de cámaras en vivo. Asimismo, hemos encontrado otras formas de seguir generando contenido invitando a periodistas de espectáculos que semanalmente realizan entrevistas a alguno de los artistas de nuestra programación de la semana. Todas estas actividades han apuntado a mantener el diálogo con la comunidad, así como a generar algunos recursos durante este período. ¿Qué proyectos han planeado en caso la cuarentena continúe? Si la cuarentena continúa, nosotros seguiremos dando clases en formato online e intentando mantener el vínculo con nuestro público brindándole materiales que tengamos en nuestro archivo, generando nuevos materiales y creando espacios de vinculación con instituciones que puedan apoyarnos con recursos, pero no es mucho más. En términos de crisis, ya desarrollamos músculo y gimnasia. Algo positivo es que, por un lado, tenemos una integración de la cadena completa: escribimos, dirigimos, actuamos, montamos, etc. Tenemos todo tipo de trabajo. Por otro lado, tenemos materiales para todas las situaciones. En ese sentido, ni la virtualidad ni el regreso al formato presencial nos va a ganar desprevenidos ni la virtualidad, ni la presencialidad. ¿De qué manera la pandemia los hizo renovarse/repensar/transformar su práctica artística? La pandemia nos hizo repensar, renovar, transformar todo, porque lo que nosotros hacíamos no se puede hacer más ahora de la misma manera en que lo veníamos haciendo. Creo que el saber que un hecho así puede ocurrir nos ha llevado a tomar una serie de decisiones pensando en el futuro. Por ejemplo, nos hemos dado cuenta de la importancia de tener registros de obras pasadas que estén en una mejor calidad, aptos para transmitir al público. Cuando las herramientas del medio virtual dejen de necesitarse como una medida paliativa, empezarán a ser estructurales para para potenciar nuestro trabajo presencial. Para nosotros, lo virtual no va a reemplazar, sino complementar y amplificar el trabajo que ya veníamos haciendo. Hay que encontrar el balance para sacarle el provecho a todo lo que lo virtual ofrece. Por ejemplo, hay un público al cual antes no podíamos llegar, que estaba interesada en nuestra programación, pero que por un tema de distancia física no podía llegar a nuestros teatros. Ahora sí es posible poner material disponible para esa audiencia. Del mismo modo, podemos streamear obras que estuvieron antes en cartelera. También, a través de las entrevistas, el espectador puede tener un material que complementa aquello que va a ver. Así, encontramos en lo virtual una herramienta para enriquecer nuestro trabajo. Comments are closed.
|
AboutCheck here to read our profiles with artists under quarantine Artists
All
Archives |